¿Te acuerdas de Robert Pirès?

- Era esa clase de jugador que le gustaba tener a todo equipo, pura magia sobre el verde que quizás mereció más títulos en su carrera a nivel de club, en la que representó a equipos como el Arsenal, Aston Villa, Olympique de Marsella y Villarreal, entre otros. 

Con la selección francesa sí ganó de todo, desde la Copa del Mundo de 1998, la Eurocopa de Bélgica-Holanda 2000, hasta dos ejemplares de la Copa Confederaciones. Fueron los años dorados del fútbol francés.

Robert Emmanuel Pirès fue una de las grandes estrellas galas, de una generación que difícilmente se repetirá, con cracks del estilo de Zinedine Zidane, Youri Djorkaeff, David Ginola, Lilian Thuram o Didier Deschamps.

Robert Pirès como miembro del Arsenal.

- Se desempeñaba por el centro del campo, a veces como organizador, pero casi siempre actuaba como interior zurdo. Era pura clase con el balón en los pies, un tipo con pase y gol que desbordaba con facilidad mientras el físico le respetase. 

Para el seleccionador Raymond Domenech tenía el defecto de ser del signo Escorpio, razón inexplicable por la que no quería contar con Pirès. Éste nació el 29 de octubre de 1973, en la ciudad de Reims (Francia).

De padre portugués y madre española, "D'Artagnan", siempre sintió debilidad por Real Madrid y Benfica, clubes a los que nunca llegaría a representar. En el Stade de Reims empieza su trayectoria futbolística, pasando varios años de formación antes de recalar en el F.C. Metz, con el que pronto alcanzaría la élite.

A mediados de los noventa daría ese salto profesional en la Ligue-1, en la que disputaría más de 150 partidos y anotaría 43 goles. Ya desde sus inicios, Pirès empezaría a jugar para una selección francesa con la que sería campeón del mundo, y dos años después de Europa.

El siguiente paso sería fichar por el Olympique de Marsella, habiendo logrado con el Metz la Coupe de la Ligue. Con el equipo marsellés no conseguiría títulos, aunque acabaría llamando la atención de otros poderosos clubes.

Pirès daría un paso importante al llegar a la Premier, donde se juntaría a otros cracks como el meta David Seaman, Dennis Bergkamp, Fredrik Ljungberg y sus compatriotas Thierry Henry y Patrick Vieira.

Aquellos "Gunners" fueron admirados por todos los aficionados al fútbol. Robert sería un fijo para Arsène Wenger, quien sabría explotar sus mejores cualidades para crear un equipo capaz de ganar diversos títulos. Los primeros llegarían en 2002, con la consecución de la liga y la FA Cup.

A medida que iba disfrutando de un buen fútbol y su mejor estado de forma, con el Arsenal iría cosechando otros títulos durante sus años por Highbury: otra Premier en 2004 y dos ejemplares más de la FA Cup.

No pudo ganar esa cotizada Champions en la que el equipo londinense compitió durante años, quedándose a un paso de lograr la hazaña en la campaña 2005\06, pero en la final del torneo se toparon con el Barça de Frank Rijkaard, que se impondría en su Francia natal por 2-1.

Compitió en la Premier League durante seis campañas, contando con ofertas de los mejores equipos, pero extendiendo sus años por Londres hasta 2006, dejando como recuerdo 62 goles en 189 partidos con los "Gunners".

Había contado con el seguimiento de los clubes más poderosos de España, pero finalmente acabaría en un Villarreal que ya demostraba un gran crecimiento como entidad deportiva, entonces entrenado por Manuel Pellegrini.

Pirès fue uno de los futbolistas franceses más talentosos de su época.

- Aunque ya veterano, Pirès aguantaría unos años más jugando a buen nivel, el que uniría al talento de otros como el uruguayo Diego Forlán, Guille Franco, Nihat Kahveci y Santi Cazorla. El francés sería la guinda del pastel.

Tras competir por Europa con el "Submarino Amarillo", Pirès volvería a la Premier para competir con el Aston Villa, donde estaría un año. Ya con 38 años, el centrocampista galo acabaría su carrera con el F.C. Goa hindú.

A nivel internacional logró mayores éxitos, entre los que debemos destacar la Copa del Mundo de Francia 98 y la Euro de Bélgica-Holanda 2000. Participó también en la Eurocopa de Portugal 2004, y finalizó su buena experiencia con la selección francesa haciendo unos números de 79 partidos en los que marcó 14 goles.