¿Te acuerdas de Oliver Kahn?

- Uno de los mejores guardametas que han visto mis ojos, cara reconocible de la Alemania de finales y comienzos del nuevo siglo que fue leyenda del Bayern de Munich y Karlsruher. Con los primeros fue campeón de la Champions y consiguió la mayoría de los títulos que adornan su valioso currículo. 

Solo él estuvo cerca de repetir la gesta del soviético Lev Yashin, pues estuvo a punto de ganar el Balón de Oro en dos ocasiones, en 2001 y 2002. Con Alemania fue campeón de la Euro 1996, aunque no disputó ni un solo partido del torneo. Entonces era Andreas Köpke quien había cogido el testigo del campeón mundial Bodo Illgner.

Oliver Rolf Kahn llegaría a participar en cuatro ediciones de la Copa del Mundo, empezando muy joven en USA 94 y terminando por concursar en el gran evento que se organizó en su país en 2006. Los alemanes caerían en semis.

Kahn lo ganó todo con el Bayern.

- Muchos creen que fue el mejor portero de su época, un tipo rudo y con grandes reflejos que era capaz de detener hasta lo imposible. Con su cara de pocos amigos, Kahn vivía el fútbol como nadie, decidiendo partidos con el simple uso de sus manos, con las que llegó a realizar grandes hazañas bajo su marco.

Oliver nació en Karlsruhe (Alemania), el 15 de junio de 1969. Ha sido un gran portero, aunque en sus inicios se decidió por ser jugador de campo. Tenía seis años cuando el fútbol alumbró su vida y se afilió al Karlsruher SC, el mejor equipo de su ciudad y donde aprendería muchas cosas que le llevarían a entrar en el primer equipo. 

Fueron muchas buenas actuaciones con el sistema juvenil, tantas que el llamado "Titán" pronto contaría para el técnico del primer equipo, Winfried Schäfer. Éste le permitiría debutar en la máxima categoría alemana, el 27 de noviembre de 1987. Desde luego no fue el debut deseado, ya que el F.C. Köln le haría cuatro tantos al joven arquero, que en su primera campaña con los mayores jugaría otro partido más ante el Werder Bremen. En sus primeros años con el equipo de su ciudad, Kahn tendría que acostumbrarse a ser el suplente del polaco Aleksander Famula.

Todo cambiaría a partir de la campaña 90\91, en la que "Volkahno" jugaría más de una veintena de partidos para el Karlsruher. A partir de entonces se convertiría en titular indiscutible y se convertiría en internacional. 

Vivía su mejor momento de forma cuando muchos clubes comenzaban a interesarse por sus servicios. La marcha del mítico Raimond Aumann motivaría su fichaje por el Bayern de Munich, al que se incorporaría en el verano de 1994.

Desde su llegada al conjunto bávaro se perfilaría como indiscutible en la portería, realizando sensacionales paradas en la Bundesliga que harían de él uno de los mejores porteros europeos que más pronto que tarde comenzaría a darse a conocer por las competiciones europeas.

Y es que en su segundo año como miembro del Bayern ya alzaría la Copa de la UEFA. Fue una temporada extraña en la que el equipo precisó de la mano de tres entrenadores de reconocido nivel como Otto Rehhagel, Klaus Augenthaler y el inolvidable y legendario Franz Beckenbauer.

Aún llegarían más títulos en los siguientes años, coincidiendo además con los mejores años del cancerbero alemán, que ya era una pieza clave tanto del Bayern de Munich como de la selección germana.

Oliver sería partícipe de grandes gestas, conquistando la Bundesliga en ocho ocasiones y la Champions League en 2001, con Hitzfeld de entrenador. A punto estaría de aupar el Balón de Oro en un par de ocasiones en los inicios del nuevo milenio, justo cuando su nombre figuraba entre el de los mejores cracks del fútbol mundial.

Quizás le faltó conseguir algo grande con Alemania, pero al menos pudo competir en los más altos niveles. Fue sobre todo con el Bayern con el que más engrandeció su figura, llegando a representar a su club durante catorce años.

Oliver Kahn estuvo a punto de llevarse el Balón de Oro en dos ocasiones.

- En esos casi tres lustros, Oliver Kahn llegó a ejercer capitán, redondeando en la liga alemana unos registros totales de 557 partidos disputados. Llegó a contar con ofertas de varios clubes importantes, pero nunca quiso dejar el Bayern.

Retirado en 2008, dos años antes había decidido dejar de jugar para la selección alemana, aquella con la que llegó a ser campeón de Europa en Inglaterra 1996 sin jugar un sólo partido. Cogió las riendas de la titularidad a partir de mediados de los noventa.

Kahn completó 86 partidos internacionales, compitiendo con la selección alemana en otras dos Eurocopas (2000 y 2004) y en los Mundiales de USA 94, Francia 98, Corea-Japón 2002 y por último en Alemania 2006.